Uno de los más populares vehículos de inversión que existe son las acciones. Este tipo de inversión es muy famosa y recibe mucha publicidad, pero rara vez uno se detiene a pensar realmente qué es, cómo funciona y si es una buena o mala inversión. Es por eso que en este artículo quiero ir revisando, paso a paso, cómo es invertir en acciones.
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El primer paso: entendiendo qué es una “acción”
La Comisión para el Mercado Financiero (Chilena) nos dice que una Acción “Representa una parte del patrimonio de una sociedad anónima abierta. Su posesión representa un derecho de propiedad y el control de un determinado porcentaje del total de la empresa.”
Esto suena bastante enredado y es mucho más fácil entenderlo a través de un ejemplo:
Imaginemos que tú eres dueño de una empresa que hace muebles. Para hacer crecer tu empresa requieres de dinero para comprar una nueva máquina. Como no tienes dinero, tienes que recurrir a una de dos estrategias: o pedir dinero prestado (como por ejemplo a un banco o a un amigo) o bien venderle un pedazo de tu empresa a una persona que esté dispuesta a poner dinero. Nos vamos a enfocar en este segundo escenario.
A su vez, las empresas, como la empresa de muebles en el ejemplo, está constituida legalmente como una “sociedad” o “persona jurídica”. Esa sociedad o persona jurídica, cuando toma la forma de sociedad anónima, está dividida habitualmente en “acciones” o “pedacitos de una empresa”.
Es decir, si eres dueño de una empresa de muebles, y esa empresa está dividida en 100 acciones, eso quiere decir que está dividida en 100 “pedacitos”. Si quieres vender a un tercero 30 pedacitos, estás vendiendo el 30% de tu empresa.
En otras palabras: cuando inviertes en “acciones” lo que estás haciendo es invertir en comprar “pedacitos” de una empresa, pasando a ser su dueño en ese pedacito.
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Existen dos grandes formas de ganar dinero con acciones
A grandes rasgos, y simplificando un poco el mundo de las acciones, tienes dos grandes formas de ganar dinero con acciones:
- Comprando barato y vendiendo caro: Básicamente la idea es la siguiente, si compras un pedacito de una empresa en $100, y luego de pasado un tiempo logras venderla en $120 (o cualquier otro número superior a $100), habrás ganado $20 en el camino. Ojo, obviamente esto tiene un lado al cual tienes que estar atento, también puede pasar que compres en $100 y termines vendiendo en $90 (o menos). Es decir, no siempre puedes ganar dinero con este mecanismo.
- Dividendos: Los dueños de las empresas tienen derecho a repartirse el dinero que ganó la empresa en el año. Esta repartición se conoce como “Dividendo”. Por ejemplo, imaginemos que tú tienes un 10% de una empresa. Si esa empresa ganó $100 en el año, a tí te corresponde como dueño el 10% de $100, es decir, $10. A menos que no hayan utilidades un año que repartirse (porque le fue mal a la empresa) o que estén de acuerdo en reinvertir el dinero, el dividendo es una suma de dinero que se te deposita en tu cuenta una vez la reparte la empresa.
Hay tantos tipos de acciones como tipos de empresas
Con los años, los inversionistas que se dedican a comprar y vender acciones, han ido creando un sinnúmero de clasificaciones de las acciones. Algunos hablan de acciones nacional y extranjeras, públicas o privadas, de gran tamaño, de pequeño tamaño, de crecimiento, dividenderas, etc.
Una de las clasificaciones más famosas es la de Peter Lynch (un muy exitoso inversionista de fines del siglo pasado), quien hablaba de empresas sólidas, de bajo crecimiento, cíclicas, de alto crecimiento, de reestructuración, con activos ocultos y joyas.
Lo importante de todo esto es reconocer que dependiendo de con quién hables, vas a recibir una respuesta distinta.
A mi juicio no importa tanto cómo clasificas las acciones, lo que importa es recordar que una acción es un pedazo de una empresa, y no un simple número en una pantalla.
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Las probabilidades de hacerte rico con acciones tienen un precio
El “Comprar Barato y Vender Caro” como estrategia suena mucho más fácil de lo que realmente es. Para ser exitoso comprando acciones TIENES que hacer un trabajo largo y tedioso: tienes que conocer en detalle la empresa, leer sus estados financieros a lo menos de los últimos 10 años, conocer su industria, sus productos, sus competidores, su ambiente, conocer su administración y sus ventajas competitivas. Es decir, tienes que conocerla tan bien como si fueras su propio dueño.
Esto significa que SI es posible hacerse rico invirtiendo en acciones PERO es muy difícil y requiere mucha dedicación.
De hecho, estadísticamente hablando, es muy habitual que las personas terminen perdiendo dinero al largo plazo cuando invierten en acciones y no saben hacerlo. Es por eso que existen otras alternativas, como las que veremos en un par de artículos más adelante, como los fondos indexados o los ETF, que nos permiten jugar con las probabilidades da nuestro favor.